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ESCRIBANO |
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| m. zool. Nombre que se aplica a los pajarillos de la familia Emberizidae , o escribanos del Viejo Mundo. La mayoría de los escribanos que crían en España son sedentarios; otros, procedentes de variados puntos europeos, llegan en gran número para invernar. De entre los más conocidos en Andalucía destaca el montesino, pajarillo confiado, que tolera bastante bien la presencia humana, y que habita en lugares muy diversos, desde las áreas cultivadas hasta la alta montaña y linderos de bosques. Suele anidar cerca del suelo en un nido con forma de copa, con ramitas bien entrelazadas y un tapizado interior de ramillas muy finas. La incubación corre a cargo de la hembra y se prolonga durante 12 o 13 días. Los pollos abandonan el cuidado paterno a los nueve, sin apenas poder volar. En la Península nidifica en casi todas las montañas. Durante el verano se alimenta de la ingente cantidad de insectos disponibles en nuestras montañas, entre las piedras y los arbustos, que en otoño sustituye por granos, semillas y, sobre todo, hierbas. Se trata de un ave sedentaria en nuestra región, sin aportes transpirenaicos, pues los movimientos de las poblaciones centroeuropeas suelen ser de corto alcance. Las nuestras, a su vez, se reúnen en otoño en bandadas mixtas con acentores alpinos. || ~ palustre. Escribano de las marismas y zonas palustres, en las que ocupa carrizales, espadañas, bordes de ribera, terrenos pantanosos y hasta campos de cultivo donde se alimenta principalmente de semillas de plantas acuáticas, así como caracolillos, escarabajos, orugas y otros insectos. El nido es un cepellón de hierbas secas o en el suelo, entre la vegetación. Pone, de abril a junio, de tres a cinco huevos, ante-oliváceo o verde claro, marcados de negro. Incuba sobre todo la hembra, durante unos 14 días; los pollos, cebados por ambos padres, vuelan tras unos 12 días. En invierno se reúne en bandos que recorren los comederos y descansan en los dormideros comunitarios. || ~ soteño. Escribano que vive entre las matas que bordean los cultivos y prados. Su población es muy numerosa entre los setos de majuelos y rosal silvestre, y los caminos llenos de zarzales y árboles dispersos. Durante la estación fría prefiere los lugares abrigados y los fondos de los valles, donde se agrupa en pequeños bandos que buscan semillas y cereales en los campos cultivados. En primavera, los bandos se dispersan y los machos comienzan a cantar, posados sobre un poste o un arbusto. A finales de abril, construye la hembra un voluminoso nido de hierba y raicillas sobre una base de musgo, en un arbusto a una altura no superior a la de un hombre. Pone de tres a cuatro huevos azul pálido, o verdoso claro con marcadas rayas y garabatos oscuros, que la hembra incuba durante unos 12 días. Los dos pollos, alimentados generalmente por ésta, vuelan después de 11 o 13 días. Se distribuye por Europa meridional y norte de África. En la Península abunda en el norte y es más escaso en el sur. || ~ hortelano. Especie de cabeza y cuello verde y garganta y mejillas amarillentas, muy apreciada por los criadores de pájaros por sus melodiosos trinos. En Andalucía se ve en las épocas de migración.
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