Diócesis antigua (Illiberitana), en la sede de Illiberis romana, una de las más importantes ciudades de la Bastetania, según Plinio. Es la Eliberri visigoda y mozárabe, sita en la actual Granada, Granata medieval, denominación que toma a partir de los siglos I-X al ser pasado el nombre primitivo de Elvira a la nueva ciudad de Castilia-Castella, fundada por los árabes, y que ya conserva después cuando Castella es destruida. En los primeros años del siglo IV se celebra en ella el famoso concilio de Elvira, al que acuden obispos de todas las regiones de la Hispania, indicio de la importancia de la sede y de su antigüedad. Son 37 las sedes hispanas representadas en el concilio, de ellas 28 enclavadas en el actual territorio andaluz, lo que indica el alto grado de romanización y cristianización del sur peninsular.
Un manuscrito de San Millán escrito el año 962, ofrece una lista de 62 obispos de Elvira, sin la datación de sus pontificados. El primero de ellos identificado, por estar presente en el mencionado concilio, es Flaviano o Fabiano. El pontificado de los nueve que le preceden en la lista puede ocupar todo el siglo III. El más antiguo de todos, San Cecilio, se habrá de atribuir, pues, al inicio de esta centuria o a últimos de la anterior; de ninguna manera al siglo I, como se defiende generalmente por coincidir su nombre con el de los Varones Apostólicos, ya que la historia de éstos es legendaria. La lista merece fe, ya que varios de los nombres pueden documentarse por otras fuentes, si bien ofrece seguramente algunas malas grafías y confusiones, como la de omitir al famoso Gregorio de Elvira o, si es que lo cita, colocarlo en el siglo III antes de Flaviano. Ciertamente la diócesis de Elvira puede estar constituida de muy antiguo, pero se carece de documentación válida para fijar una datación precisa. En el siglo V ha de sufrir la vejación de los vándalos y en el VI pasa a dominio de los bizantinos por algunos lustros. En este periodo se anexiona algunas parroquias de las vecinas diócesis de Málaga y Egabrum (Cabra), según se sabe por la reclamación de sus obispos en el concilio de Sevilla de 619. Caída en poder de los árabes al comenzar el siglo VIII, puede, al parecer, gozar de cierta libertad, quizá porque, según Levy-Provenzal, son pocos los musulmanes, los dominadores, y mayoría los cristianos y judíos, de tal manera que la comunidad puede destituir a su obispo Samuel por arabizante, quien se refugia en Córdoba. En el siglo XII la ciudad es destruida por los almohades y cesa el episcopologio hasta el tiempo de los Reyes Católicos. ( -> véase Diócesis andaluzas e Iglesia en Andalucía ). |