Lugar de oración en la Andalucía árabe. La división fundamental de las mezquitas andalusíes consiste en un patio, donde suelen situarse los servicios necesarios para la ablución que marca el Islam antes de realizar las plegarias, y una sala de oración que concentra a los creyentes en torno al mihrab que señala la dirección hacia la Meca, y que en la Península Ibérica, sobre todo los levantados durante el periodo omeya, adoptan una desviación hacia el Sur. La sala de oración se dispone en una serie de naves cuyo número suele oscilar, según el tamaño de la mezquita, entre tres y once. La construcción se completa con un alminar desde donde, cinco veces al día, el almuédano convoca, de viva voz, a la oración. Los alminares del periodo omeya darán paso con los almohades * a torres elevadas que serán vistas desde todo el espacio urbano y que han quedado como modelos en el Islam de Occidente hasta nuestros días. La oración del mediodía del viernes, el día festivo musulmán, reviste una importancia especial y durante ella se realiza la jutba o sermón. Durante ella, en la Edad Media, se invocaba el nombre del emir o califa gobernante en cada momento. Los textos andalusíes distinguen entre las mezquitas de barrio y la aljama o mezquita mayor de una población relevante. En las grandes capitales de la Andalucía árabe las mezquitas acogen la enseñanza, sobre todo la superior, antes de constituirse las primeras universidades, establecidas por el poder público, en el siglo XIV. Los oratorios sirven en la ordenación urbana como aglutinadores de los barrios que componen una ciudad. Con la conquista cristiana esta organización dará luego lugar a la collaciones * o parroquias.
A lo largo de la historia de la Andalucía árabe, resalta una serie de mezquitas, dentro del amplio conjunto de oratorios con los que contó el país. Una de ellas es la de Carteia, la primera fundada en el país, o la de Córdoba, que data del siglo VIII y que es ampliada en varias ocasiones. En el emirato omeya se erige la de Ibn Adabbás de Sevilla, sobre el solar de la actual Colegiata del Salvador. En tiempos del Califato, se construyen las de Carmona y Almería. De los Reinos de Taifas * proviene la aljama de Niebla. Los almorávides * , ya en el siglo XII, comienzan a construir la del Alcázar de Jerez de la Frontera o la del castillo de San Marcos en el Puerto de Santa María. Los almohades fundan la segunda mezquita aljama de Sevilla, que ocupa el solar de la actual catedral, y reforman la de Málaga. Los nazaríes * de Granada levantan mezquitas, como la mayor de su capital o la del recinto de la Alhambra.
Durante la segunda mitad del siglo XX han surgido en Andalucía nuevas mezquitas, levantadas para atender las necesidades de las comunidades musulmanas actuales. Éstas proceden de procesos inmigratorios o de conversiones al Islam efectuadas sobre todo durante las últimas décadas del siglo. Destacan, por el número de musulmanes radicadas en ellas, los oratorios de las grandes capitales de Andalucía, como Granada, Málaga o Sevilla, aunque existen también otras poblaciones con mezquitas modernas. [ Rafael Valencia ].
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