| (HU). Municipio onubense de la Comarca del Andévalo Oriental, se sitúa en una zona de transición entre Sierra Morena y la costa onubense, en el límite con la comarca minera de Río Tinto. El pueblo se sitúa a una altura de 273 m., en las faldas de las sierras de Rite y del León, y su término municipal cuenta con una extensión de 219 km2 y una población de 12.615 h. en 2006. En su término se encuentran importantes restos arqueológicos, destacando el conjunto dolménico de los Gabrieles, el tholos de Valdelagrosa, los dólmenes de la Mesa de la Hueca. De época romana existen restos de un camino que cruzaba el término de norte a sur y en el Museo Mineralógico de la ciudad se conservan numerosos utensilios romanos procedentes de las minas de Río Tinto, así como un pedestal y un miliario. El origen del actual núcleo, no obstante, se encuentra en una alquería o venta de origen árabe que recibe el nombre de Facanía, perteneciente a la cora de Niebla y, tras la fragmentación del califato, y a finales del XI se integra en el reino abbasí de Sevilla y al reino almohade de la misma ciudad en el XIII.
Tras la conquista castellana, permanece parte de la población, que se va diluyendo, aunque aún a principios del XVII había una Morería, según el historiador francés Lapeyre. En 1369 aparece nombrada como Posada de Facanía en el acta fundacional del condado de Niebla y en el siglo XV cambia su nombre por el actual de Valverde del Camino, en referencia a la ya citada vía romana. En 1591 existen ya unos 1.500 habitantes, y a comienzos del siglo XVIII, la aldea de Valverde del Camino sigue dependiendo de Niebla, de la que se independiza en 1732, obteniendo el título de villa. Por estas fechas, el municipio comienza el 'pleito de los baldíos' con Niebla, una disputa por ciertas propiedades comunales que se salda en 1965, cuando Valverde renuncia a sus derechos y Niebla le cede una 3.000 ha situadas en la margen derecha del río Tinto. La permuta se lleva a cabo en 1977, siendo la última reestructuración municipal de la provincia. Sus monumentos más importantes son la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Reposo, de los siglos XVI-XVII, y la ermita de Santa Ana, del XVI. De su arquitectura inglesa, producto de la explotación británica de las minas de la zona, destaca la antigua estación de ferrocarril, construida en 1868, las oficinas centrales de The United Álcali Company Limited y la Casa Dirección, que hoy alberga un museo etnográfico. También es de interés la visita a su plaza de toros, del siglo XIX. Las características de las tierras de Valverde, poco fértiles, y el declive de la minería obligan a sus habitantes a la diversificación económica. De esta forma, en Valverde del Camino aparecen dos actividades de gran peso, las artesanías del zapato y del mueble. En Valverde se elaboran los ya míticos "botos", pero también se fabrican capotes para la lidia, el ya famoso aguardiente Zarza Mora, maderas para exteriores y chimeneas, material de protección y seguridad laboral, etc. Todo ello deja una renta media declarada bastante elevada, superior a los 12.000 euros en 2004. Sus fiestas más importantes son los carnavales, la Semana Santa, la feria y la velá de Santa Ana en julio y las fiestas de la patrona, la Virgen del Reposo, en septiembre. También cuenta con gran tradición el peregrinaje hacia la ermita del Rocío. En su gastronomía destacan platos como el espeto de carne asada, el guiso de frijoles y gurumelos; así como varios dulces.
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