(MA). El municipio de Manilva se encuentra situado en el extremo suroccidental de la provincia de Málaga, en pleno litoral mediterráneo de la Costa del Sol "comarca a la que pertenece", limitando con la provincia de Cádiz y el río Manilva * . Con una extensión superficial de 35 km 2 , posee 7,8 km. de costa, que terminan en una zona de acantilados llamada Punta Chullera en el extremo sudoeste. En 2005 la población del municipio ascendía a 9.624 h. censados, la mayoría en la propia localidad de Manilva, que se haya en el interior a dos kilómetros de la costa, aunque existen otros núcleos como Sabinillas, El Castillo, Hondacavada y el Puerto de la Duquesa. Su ubicación geográfica es privilegiada, puesto que, por un lado, su cercanía con el Estrecho de Gibraltar y la capital provincial le confiere una gran accesibilidad nacional e internacional; por otra parte, su proximidad al Parque Natural de los Alcornocales permite disfrutar de un gran espacio protegido, y, por último, está bien comunicado con cualquier lugar de la Costa del Sol a través de la autovía del Mediterráneo y la N-340.
El medio físico de Manilva presenta una orografía suave, muy diferente de las sierras del interior de la provincia, pues su morfología se compone de una sucesión de lomas de escasa altura, sobre una de las cuales "la de los Mártires" se asienta la ciudad. Ello favorece la aparición de playas anchas y extensas de arena fina, como la de La Duquesa, Gaviotas o Sabinillas, que suponen uno de los principales atractivos y recursos con que cuenta el municipio. A ello acompaña un clima mediterráneo suave, con una precipitación media anual en torno a los 750 milímetros y una temperatura media de 17º C. También puede distinguirse una hidrología formada por una serie de arroyos que desembocan en el mar como son los del Indiano, la Martagina, el Estanquillo o el de Alcorrín.
Los orígenes de la presencia humana en la zona se remontan muy atrás, con yacimientos neolíticos "destacan el Cerro del Castillo, del bronce final", aunque son más importantes los restos romanos, como atestigua la villa de Sabinillas. Durante la época musulmana estas tierras formaban parte de la cora o provincia califal de Málaga, luego, en el siglo XI, de la taifa de Sevilla y del reino almohade de la capital andaluza en el XIII, pasando hasta finales del XV a integrar el reino nazarí de Granada. En 1528 por orden de Carlos V y el duque de Arcos medio centenar de vecinos de Casares se instalan en el Cortijo, fundando la actual Manilva con el fin de obtener mayor protección para el litoral. En 1796 el Real privilegio de Villarga la segrega de Casares, convirtiéndose en término municipal independiente.
La aparición del fenómeno turístico relega a la pesca y a los viñedos "que se remontan al siglo XVI" como las actividades y recursos económicos predominantes de Manilva. Sin embargo, las viñas "se cultiva la variedad de moscatel orientada al vino de mesa" mantienen aún una presencia importante paisajísticamente hablando, pues se extienden por muchas de sus lomas compartiendo el suelo agrícola principalmente con frutales. El mantenimiento de este entorno puede explicar que el modelo de turismo de masa no se haya adueñado de Manilva, puesto que, junto con Casares, es el municipio de menor implantación turística de la Costa del Sol occidental.
Potenciar este reclamo paisajístico vinculado tanto a lo agrario como al litoral sería una forma adecuada de asegurar un recurso sostenible que permitiera atraer tanto un turista de playa, como deportivo o rural. Otro gran activo en este sentido es el patrimonio histórico y cultural con el que cuenta Manilva, en el que se puede destacar la iglesia de Santa Ana "finales del siglo XVI", el castillo de la Duquesa, el Ingenio Chico o la torre de Chullera, sin olvidar disfrutar de las fiestas de San Juan "24 de junio", su tradicional romería a la ermita de San Adolfo "27 de junio", el día del Carmen y la fiesta de su patrona Santa Ana. [ Ángel Luis Lucendo Monedero ].
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