| El blues es un género musical que se basa en una estructura de doce compases que alterna tres acordes y que utiliza las llamadas Blue notes , alteraciones de algunas notas que presumiblemente se remonten a las gamas pentatónicas africanas. No obstante, hay una mayor carga semántica en dicha voz: "El blues es sólo una mujer llorando por su hombre", afirma J. Mayo Williams. Y remite, también, a un estado de ánimo, próximo a la tristeza, cuya primera expresión en inglés se remonta al siglo XVI: "The blue devils" hace alusión a los demonios de la melancolía y la depresión. Esta estructura melódica nace de los esclavos negros del sur de Estados Unidos, posteriormente incorporada a los sonidos que emergen en dicha zona, a comienzos del siglo XX.
El blues en Andalucía. Los primeros coqueteos con el blues se producen entre los años sesenta y setenta del siglo XX, de la mano de Silvio Fernández Melgarejo (La Roda de Andalucía, 1945). Silvio, tal es su nombre artístico, incorpora algunos pasajes de blues a su repertorio, que media desde la canción italianizante "que parodia como solista" al rock and roll de Luzbel, el grupo en el que toca durante algún tiempo la batería. Buena parte del llamado rock andaluz incorpora ocasionales fraseos blueseros, como por ejemplo el grupo Guadalquivir. Esta tradición imprime algunas piezas de Gualberto, incluso José Mercé llega a interpretar un blues en su disco Aire y Kiko Veneno ejecuta una espléndida versión de "Perdido en el blues de Memphis", de Bob Dylan. Otro andaluz, Joaquín Sabina, se inspira en el blues para varias de sus composiciones. Se trata de un ritmo al que rinde homenaje expreso Pata Negra con su disco Blues de la Frontera .
Rafael y Raimundo Amador, bajo la bandera de B.B.King, se convierten en abanderados de esta tendencia, que en la década de los ochenta del siglo XX verá alumbrar formaciones como Algeciras Blues Exprés * o Caledonia Blues Band, un grupo sevillano con aires de leyenda marcado por Domingo "Mingo" Balaguer, un armonicista heredero de los míticos "sopladores" de Chicago. Se llega a hablar entonces del "Guadalssissippi", con la emergencia de otras bandas hispalenses a finales de los ochenta y comienzos de los noventa "como Entresuelos y Blues Boys" que abren paso a otras influencias, como las que terminan relacionándolas con el jazz ( -> véase Jazz ), el aire de la West Coast de California y el blues de fusión, que se acerca al flamenco, a la música latina y al funky.
En las filas de Caledonia Blues Band, Balaguer encuentra a Quico Bonal, un guitarra con el que abordará futuros proyectos musicales, como The Blues Machine, que surge en 1996. Antes, daría forma a otros grupos, como Bluesville, que sigue manteniendo desde 1995. En el año 2000, de nuevo junto a Bonal y otros componentes como Fernando Torres (bajo), Alberto Miras (teclados), el cantante australiano Brent Larkhem y el batería Xavier Reija, funda The Blues Blaster. Con este elenco realiza una gira por Estados Unidos y graba dos discos, el último de ellos, Keep The Blues alive , es concebido como un homenaje al rithm&blues, aunque incorpora elementos del soul-funk. Son conscientes, desde luego, de la incidencia del blues en Andalucía, con un amplio número de músicos, pero también con la presencia frecuente de locales, sellos discográficos o festivales como el de Antequera y La Isla de Blues, en San Fernando. Los Andabluses, con Diego Amador y Lolo Ortega "que pasa del rock de Garra al blues de la Caledonia", combinan el rithm&blues y el flamenco, y versionan desde B.B. King a James Brown.
Entre las formaciones pioneras de esta tendencia cabe destacar a Boníato Blues Band (Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, 1984), que viaja a medias entre el jazz y el blues, aunque coqueta con el folk, el country, el rock, el soul o, desde luego, el rithm & blues. De origen canario-andaluz, Diego Manzaneque "bajo, voz, guitarra y composición" graba Algo más que blues , cantando en español e inglés y rindiendo tributo a King Crimson con "I talk to the wind". El aire del blues atraviesa el repertorio del dúo malagueño que conforman Anita Rowe y Carlos Germade "imprescindible su "Little fishes Hermanas sister"", con guiños a Janis Joplin. Pero, definitivamente, empapa la trayectoria musical del granadino Joaquín Sánchez, guitarrista de blues eléctrico que apuesta por la pureza desde que funda la Blues Band de Granada hasta cuando está al frente de Blues de Garrafa.
Nuevas formaciones. En la realidad del blues andaluz destaca el grupo Charmers, con Javier Delgado (contrabajo), Paula Haynes (voz), Pepe Delgado (guitarra), Juan Arias y la batería de Manolo Vergne, junto con Solete & Colín. A ellos se les suma ocasionalmente Michaer Lindner o Rafael Amador. Por su parte, Alternativa Dawson entremezcla el blues con el rock clásico de los años sesenta. Otros nombres relacionados con este movimiento en Andalucía son Blue Key, TroleBlues y Blues de Bellota. Resulta sumamente difícil enunciar una historia del blues en Andalucía, si se tiene en cuenta la inestabilidad de los grupos y su cambio de nombres: Barbakiu o Sweet Blues Chicago forman parte de una larga relación en la que los músicos se intercambian, aparecen y reaparecen como ojos de Guadiana. The Pure Tones reúne a principios del siglo XXI a músicos sevillanos de bandas de blues que se remontan a comienzos de los años noventa. Entre ellas, las Caledonia Blues Band, Algeciras Blues Express, Los Perkins, Entresuelos o Bluesters. En 1993 se forma en Huelva The Blue Cats, con aires de la West Coast y que cruza la frontera rumbo al Algarve portugués. En 2000 se proclaman ganadores de la llamada Guerra de las Bandas en Sevilla. También en Huelva, y provenientes de bandas como la All Friends Band, Antonio Toscano (guitarras) y Manuel Soto (armónicas) ponen en pie el grupo Pin & Ito Blues Duo para rendir tributo al blues de Chicago, al jumpin" blues californiano y los ritmos shuffle. [ Juan José Téllez ].
|
