(sevilla, 1836-madrid, 1870). Poeta y escritor. El 17 de febrero de 1836, en el número 26 de la calle Conde de Barajas del sevillano barrio de San Lorenzo, nace Gustavo Adolfo Bécquer, hijo de José Domínguez Insausti Bécquer y Joaquina Bastida Vargas. El padre es un pintor costumbrista más conocido como José Bécquer, apellido éste proveniente de unos antepasados flamencos que se establecen en Andalucía a finales del siglo XVI. La orfandad le sobreviene muy temprano a Gustavo Adolfo, pues José Bécquer muere cuando el futuro poeta tiene solo cinco años de edad. La madre también fallece muy prematuramente, en 1847, cuando Gustavo Adolfo cuenta once años.
Formación. Los primeros estudios los inicia Bécquer probablemente en el colegio de San Antonio Abad, pero los continúa a partir de 1846 en la Escuela de Mareantes de San Telmo, una institución en régimen de internado que subvenciona el Gobierno para niños huérfanos, pobres y de estirpe noble. En esta Escuela conoce a Narciso Campillo, con quien trabará una duradera amistad y junto al que escribe "con diez años de edad solamente" Los conjurados , un drama escolar que llega a representarse en San Telmo.
El 7 de julio de 1847, por Real Orden, queda suprimido el Colegio de San Telmo y Bécquer, ya huérfano de padre y madre, es recogido por sus tías Amparo y María Bastida; por entonces visita con frecuencia a su madrina Manuela Monnehay, en cuya casa encuentra una biblioteca bien abastecida de obras de Zorrilla, Espronceda, Chateaubriand, Balzac, Byron, Víctor Hugo y Hoffmann, y de la lectura de este último tal vez procede el gusto becqueriano por lo legendario y fantasioso. Durante estos años asiste también como aprendiz a los estudios de los pintores Antonio Cabral Bejarano * y de su tío Joaquín Domínguez. Aunque admira la pintura y nunca abandonará el dibujo, el gusto de Bécquer se orienta hacia la literatura gracias a influencias como las del poeta Alberto Lista * , al que alcanza a conocer en el último tramo de su vida y al que dedica en 1848 una oda con ocasión de su muerte. De 1852 data el primer poema amoroso que se conserva, la "Oda a la señorita Lenona en su partida".
Se instala en Madrid. En el otoño de 1854, cuando echa a andar el Bienio Progresista dirigido por el general Espartero, Gustavo Adolfo llega a Madrid con los 75 duros en el bolsillo que le había dado su tío Joaquín. Las estrecheces económicas en la capital de España son muchas para un escritor recién llegado, y Bécquer las combate con colaboraciones periodísticas, adaptaciones teatrales y componiendo libretos de zarzuela. En 1856 arregla para el teatro, junto a Luis García Luna y Julio Nombela, la novela de Víctor Hugo Nuestra Señora de París , que no llega a representarse. Entre 1856 y 1863 escribe zarzuelas, primero junto a García Luna bajo el seudónimo de "Adolfo García", y después con Rodríguez Correa bajo el seudónimo esta vez de "Adolfo Rodríguez". También por estas fechas escribe la mayor partes de las Rimas y, en 1857, publica la primera entrega de la Historia de los templos de España , que concluye el 5 de enero de 1858. Esta Historia es la única obra que Bécquer conocerá impresa en libro, todas las demás, ya sean en verso o en prosa, aparecen desperdigadas en periódicos y revistas.
En 1858 cae muy enfermo de tuberculosis o sífilis, y al año siguiente publica en la revista El Nene la primera rima, la que ahora figura como XIII: "Tu pupila es azul, y cuando ríes...". En 1860 conoce a Augusto Ferrán, que llega a ser su mejor amigo y, tras la desaparición del poeta, uno de los más entregados albaceas de su legado literario. En 1861 contrae precipitado matrimonio con Casta Esteban Navarro tras haber mantenido relaciones amorosas con Julia y Josefina Espín. Antes del casamiento, Bécquer está empleado muy poco tiempo como escribiente en la Dirección General de Bienes Nacionales. Enseguida fue despedido por garabatear dibujos en su expediente. En 1862 nace su primer hijo, Gregorio Gustavo Adolfo, y en 1863 pasa el verano y el otoño en Sevilla. Ese mismo año, la familia Bécquer se traslada al desamortizado Monasterio de Veruela, en Zaragoza, para que el poeta recupere la salud entre aquellos aires fríos y secos. Desde allí envía regularmente al periódico madrileño El Contemporáneo los textos que luego reunidos compondrán las cartas Desde mi celda . Al año siguiente de su retiro veruelense, en diciembre de 1864 recibe del ministro de la Gobernación Luis González Bravo el nombramiento de censor de novelas con una renta anual de 24.000 reales. Seis meses después, en junio de 1865 sale Narváez del Gobierno y entra O"Donnell, y en consecuencia, los recomendados como Bécquer tienen que abandonar sus empleos. En julio de 1866 recupera su trabajo como censor, aunque solo lo podrá conservar hasta la Revolución de Septiembre de 1868.
Destrucción de las Rimas. El año 1868 es especialmente desgraciado para el escritor. En verano, se separa de su esposa. La revolución de septiembre, La Gloriosa, se lleva por delante el empleo de Bécquer y también el manuscrito original de las Rimas , que guardaba el ministro González Bravo en su palacio. Los revolucionarios incendian el palacio y entre todo lo que arde se halla el original de Bécquer, que iba a ser editado a costa del propio ministro.
Esta cadena de acontecimientos desafortunados es, probablemente, lo que empuja a Gustavo Adolfo a marcharse a París. No está claro, sin embargo, si Bécquer llegó a París o si no pasó de Hendaya, donde pudo despedirse de González Bravo, que acompañaba en el exilio a Isabel II. Sea en París o en Hendaya, Bécquer permanece poco tiempo y enseguida regresa a España, a Toledo, donde vive con su hermano Valeriano. En 1869 rehace de memoria las rimas y las incluye en el Libro de los gorriones , añadiéndoles además la conocida "Introducción sinfónica".
"Poeta del amor y del dolor". El 29 de septiembre de 1870 muere Valeriano de hepatitis aguda. Gustavo Adolfo no le sobrevive apenas tres meses, pues fallece a las diez de la mañana del 23 de diciembre. Al tiempo que moría Bécquer empezaba en Sevilla un eclipse total de sol. El 24 de diciembre fue enterrado en la madrileña Sacramental de San Lorenzo. Al finalizar el sepelio, el pintor Casado del Alisal propone a Narciso Campillo, Augusto Ferrán y Rodríguez Correa editar las obras de Bécquer. Por la noche de ese mismo día (Nochebuena de 1870), los amigos de Bécquer reunidos junto al ministro de Estado Manuel Silvela convienen en recopilar todas sus obras. A principios del año siguiente aparece la primera edición de las Obras de Bécquer en dos volúmenes. "Poeta del amor y del dolor", de esta forma es calificado Bécquer en el azulejo conmemorativo que hay en la fachada de la casa donde muere (actual número 25 de la calle madrileña de Claudio Coello). [ Alberto Guallart ].
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