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AROCHE |
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| (HU). Municipio de 3.140 h., en la frontera con
Portugal y Extremadura. Situado en la comarca y en el Parque Natural de
la Sierra de Aracena y de los Picos de Aroche, su extenso territorio
"casi 500 km
2
" presenta un importante legado histórico-artÃstico
que merece ser recorrido con atención. Su topografÃa es agreste, formada
por los Picos de Aroche al norte y la Sierra de Mojonato al sur, y el
término está regado por dos rÃos: el Chanza y la Ribera del Peramora.
Cuenta con un microclima de veranos templados, poco lluviosos, con
tempreraturas hasta los 30ºC. Los primeros asentamientos humanos se
sitúan cerca de las zonas fluviales del Chanza y Alcalaboza, y su
economÃa depende casi exclusivamente de la agricultura (cereales) y de la
crÃa de ganado porcino (cerdo ibérico), aunque cuenta con un pequeño
tejido industrial de tratamiento del mármol y del sector servicios. Los
romanos, primeros pobladores, fundan la ciudad de Arucci junto a
numerosos asentamientos rurales (
villae
o
fundi
) y una calzada que enlaza con la vÃa que va de
Emérita a HÃspalis. En los comienzos de la época musulmana, Abd
al Aziz vence a los visigodos y pacifica la zona; en el siglo XI, Alhaken
II promulga un edicto sobre la apertura de las minas de la Sierra de
Aroche y en el siglo XIII llegan algunos repobladores del norte
peninsular, amparados por concesiones reales, pero la población autóctona
andalusà permanece parcialmente y, a principios del XVII, como en tantos
otros pueblos andaluces, hay una morerÃa en Aroche. La guerra civil de
1474 afecta a la villa hasta que es conquistada por el duque de Medina
Sidonia, quien tiene que devolverla en 1477 tras el derribo de
fortificaciones y torres fronterizas, refugio de malhechores. A partir
del siglo XVII se convierte en la capital militar de la Sierra de
Aracena, donde tienen su asentamiento las guarniciones españolas frente
al ejército luso durante la guerra contra Portugal (1640-1668). El
periodo bélico supone la despoblación y el empobrecimiento de la zona
hasta que en el siglo XVIII logra recuperarse mediante la dedicación de
grandes extensiones de tierra a la siembra de cereales. Todos estos
avatares históricos dejan su impronta cultural en un rico patrimonio
artÃstico: el castillo de origen almorávide, que domina el pueblo y el
valle del Chanza, es construido en el siglo XII y conserva la entrada
original con arco de herradura apuntado. Alberga la plaza de toros y, en
un recinto adjunto, el Museo Arqueológico que contiene restos de
yacimientos romanos (epigrafÃa), calcolÃticos (hachas de sÃlex),
orfebrerÃa de los siglos XV al XVIII (cruz de plata, cálices cordobeses)
y ornamentos religiosos. Otros lugares emblemáticos de este municipio son
la iglesia de la Asunción "de estilo mudéjar-gótico-renacentista,
construida en el siglo XV por maestros de la catedral de Sevilla", la
capilla del Cristo (siglo XVII), el convento-cillerÃa de los Jerónimos
(siglo XVIII), dos grandes molinos con macizas torres, las murallas
(construidas en el siglo XVII), las casas solariegas (Conde del Ãlamo,
Palacio de los Tinocos, Marqués de los Arcos, Vizconde de Monteblanco,
Conde de Palancar y Marqués de Valdeloro) y un museo único en el mundo,
el del Santo Rosario, cuyas paredes y vitrinas están cubiertas de
rosarios fabricados o regalados por personajes famosos y estampas e
imágenes de la Virgen. Los habitantes de Aroche celebran la Semana Santa
con una escenificación del Desprendimiento. Otra fiesta religioso-popular
muy famosa es la romerÃa de San Mamés, el domingo de Pentecostés.
Celebran la feria en la segunda quincena de agosto y la feria del ganado
en la segunda quincena de septiembre. En todas ellas  se puede
disfrutar de una gastronomÃa muy apreciada, cuyo componente básico es el
embutido del cerdo ibérico. Su entorno natural, el Parque de la Sierra de
Aracena y de los Picos de Aroche, ofrece paisajes atractivos con
espectaculares cambios cromáticos estacionales, una variada y rica fauna
y una vegetación frondosa de carácter mediterráneo.
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