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SAAD |
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Sultán nazarí de Granada que gobierna (1454-1464) al final del largo periodo de decadencia (1391-1464) por el que atraviesa la última administración política de al-Ándalus tras la muerte de Muhammad V * . Abu Nasr Saad gobierna dos veces, en medio de un ambiente de luchas sucesorias e internas y en un momento en el que varios gobernantes se disputan el sultanazgo granadino. Saad es proclamado por los abencerrajes * en Archidona en agosto de 1454, frente a Muhammad XI * , denominado ?el Chiquitito?, que dominaba los territorios de Granada, Málaga, Guadix y Almería. A Saad, que había vivido en la corte de Juan II de Castilla (1405-1454) * , lo denominan las fuentes castellanas Ciriza, por Sidi Saad, o Muley Zad. Con Enrique IV (1454-1474), el hijo y sucesor de Juan II, la monarquía castellana intensifica sus ataques contra los nazaríes. Para hacer frente a su opositor, Muhammad XI, Saad solicita la intervención del rey castellano, quien se quedará como rehén a su hijo, Abu-l-Hasan Ali * . En ese momento, 1455, los benimerines * defienden a Saad, desde Ronda. Gibraltar estaba en poder de Muhammad XI. Con las ayudas de las Cortes castellanas y el apoyo de una bula del Papa Calixto II de 1455, las tropas de Enrique IV atacan el territorio nazarí, saqueando los alrededores de Archidona e intentando sin éxito tomar Málaga. Una entrevista de Saad con el monarca castellano logra que Enrique IV no ataque las zonas fieles al sultán que era su aliado. Sin embargo se lanza contra los territorios dominados por Muhammad XI, como Alcalá la Real o la misma vega granadina. La estancia del castellano en el área termina en julio de 1455, coincidiendo con la salida de Muhammad XI de Granada hacia las Alpujarras y la entrada en ella de Saad. Los partidarios de Muhammad XI, llamado ?el Rey Chico?, le convencen para que se apoderase de Granada. Sin embargo, Abu-l-Hasan Ali, el hijo de Saad, lo ataca y lo conduce a la Alhambra, donde es estrangulado, en una de las salas que dan al Patio de los Leones. Al año siguiente, Enrique IV reanuda su campaña contra los territorios nazaríes. Al llegar a Gibraltar, por mediación del gobernador del sultán nazarí, recibe la invitación para trasladarse a territorio benimerín y visitar Ceuta, en poder de los portugueses desde 1415. Saad había aprovechado su ausencia para atacar el área de Jaén. El rey castellano vuelve de inmediato a la Península y sus tropas toman Jimena de la Frontera y arrasan la de nuevo la vega granadina. Saad es obligado a aceptar una tregua de cinco meses y el pago de un fuerte tributo. Durante los años siguientes los ataques continuarían, terminando con la toma de Gibraltar y Archidona en 1462. Saad intenta entonces liberarse del yugo que le suponían los abencerrajes que le habían llevado al trono. La matanza de algunos personajes en Granada empuja a los abencerrajes a proclamar en Málaga a Yúsuf V * , que terminaría por tomar la capital nazarí en ese mismo año. En noviembre de 1463 tiene que salir de la ciudad, muriendo antes del final de ese año. Saad vuelve a ocupar el trono granadino. Un nuevo ataque de Enrique IV impone al monarca otra tregua onerosa que acabaría con la subida al poder de su hijo Abu-l-Hasan Ali, con el apoyo de los abencerrajes. El monarca depuesto se retira a Salobreña, donde muere. [ Rafael Valencia ].
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