| (HU). Comarca de delimitación compleja, pues se encuentra entre territorios con tradición histórica como son el Condado, la sierra y el litoral, formando parte naturalmente del Andévalo. Linda al norte con la Sierra de Aracena * , al este con la del Andévalo oriental, al sur con la Comarca de la Costa y al este con la frontera de Portugal. La razón de la segregación de un territorio más extenso y dominado por Valverde se justifica tanto por la extensión de su territorio como por la autoadscripción de su población. En el primer aspecto señalar que dicha extensión lo aleja de una cabecera principal en Valverde, cayendo de esta manera mucho más bajo el peso de la influencia funcional de la capital, Huelva. De ahí que la cabecera (aunque haya que colocarla entre comillas) de la Comarca del Andévalo Occidental se deba repartir entre las poblaciones de la Puebla de Guzmán y la pequeña conurbación rural que llegan a formar los núcleos de El Almendro y Villanueva de los Castillejos.
La amplitud del Andévalo en su totalidad sería una comarca demasiado extensa, con un territorio que casi duplicaría la media de las demás comarcas andaluzas. En el segundo, cabe destacar que el peso tradicional de la identidad del Andévalo se refleja en el sentimiento de pertenencia de sus habitantes a este territorio, el cual constituye una Comarca Leader , de la que sólo quedarían fuera los municipios de San Silvestre y Villablanca, en la Comarca de la costa noroeste. Los límites del Andévalo Occidental abarcan los siguientes municipios: El Almendro, Alosno, Cabezas Rubias, El Granado, Paymogo, Puebla de Guzmán, San Bartolomé de la Torre, Sanlúcar del Guadiana, Santa Bárbara de Casa y Villanueva de los Castillejos.
La mayor parte de este territorio se encuentra sobre una penillanura basculada hacia el oeste recorrida por sierras de pequeña altitud con clima mediterráneo y componente continental atenuada con veranos muy cálidos. La comarca representa el extremo más occidental de Andalucía, y su relieve constituye un terreno de transición entre la Sierra de Aracena y el curso bajo del río Guadiana. Su composición geológica consta fundamentalmente de rocas del paleozoico superior, cuarcitas y pizarras del devónico, correspondiendo geomorfológicamente a una penillanura pizarrosa. La encina y el alcornoque son las dos especies arbóreas más abundantes, formando con frecuencia dehesas que en algunos casos ceden terreno a manchas de eucaliptales. La vegetación arbustiva es la típica del bosque mediterráneo con jaras, brezos, tomillos y romero. Delimita al este con la comarca del Andévalo Oriental, cuya frontera natural está constituida por la margen poniente del Oranque, cauce afluente del río Odiel.
El Andévalo Occidental está íntimamente ligado al río Guadiana, compartiendo su entorno natural y vinculado a su historia. La historia de esta comarca está muy marcada por la función de frontera con el país vecino, Portugal. Sin embargo, los recursos hídricos dependen más directamente de los cauces del Chanza y el Malagón, los cuales se represan en el embalse del Chanza. Estos dos ríos pertenecen a la cuenca del Guadiana, al que tributan y sobre la que también transcurren otros arroyos de carácter esporádico y torrencial. Esta cuenca se convierte en un recurso vital para territorios adyacentes, como zonas de regadío en comarcas de la costa. A principios del siglo XXI se construye la presa del Andévalo en el área de confluencia de los afluentes Malagón, Cobica y Viguera cuyo embalse está destinado a convertirse en el principal recurso hídrico del Andévalo Occidental.
Es al sur de este embalse donde existe una mayor densidad de explotaciones agropecuarias, con desmonte de zonas de dehesas en favor de cultivos de cereales, que alternan con matorral de degradación, donde el aprovechamiento principal es la caza. En su día son relativamente importantes las cabañas ovina y porcina, además de la recolección de miel, gurumelos y otros productos del monte.
Los antecedentes de los asentamientos, al igual que el resto del Andévalo, hay que buscarlos en periodos tan remotos como el Calcolítico. Están bien documentadas las vinculaciones tartésicas y fenicias con Tharsis, a la que se asocia con las míticas minas mencionadas en la Biblia con similar topónimo. De ahí esta tradición minera tiene su apogeo con la Bética, territorio del que el Guadiana es límite y también enlace con Mérida y tras la cual sigue un oscurecimiento medieval con ausencia de asentamientos significativos en épocas visigoda y árabe. Los poblamientos de la era Moderna tienen un carácter colonizador, siguiendo una dinámica de ocupación de territorios tras la conquista de Niebla en el siglo XIII, los cuales tienen el objeto de frenar los posibles avances de los vecinos tras la frontera del Guadiana.
Esta condición es determinante, añadiendo más dureza si cabe a la forma de vida de una zona de difícil explotación agrícola y cuyos ganados se convertían en preciado botín de guerra a ambos lados de la frontera, por lo que lógicamente debemos de considerar iguales condiciones a la zona del Alentejo portugués. Estos hechos suponen la permanencia durante siglos de un territorio extenso como solución de continuidad entre Estados, que en el siglo XVII repartieron los desastres de la guerra entre ambas márgenes del Guadiana. El siglo XVIII trae un intervalo de prosperidad en el que la población crece; posteriormente, la invasión francesa tiene sus consecuencias negativas, pero en menor medida que en el Andévalo oriental.
El descenso de la población es muy pronunciado en todo el Andévalo, más aún si cabe en la comarca occidental al tratarse de un territorio con menos diversificación y más dedicación a las actividades agrícolas, con un terreno de por sí repetidamente considerado como poco apropiado para éstas. El porcentaje del sector agrícola y ganadero supera el 40%, pero si tenemos en cuenta que la población desciende en los últimos 40 años en un 45% debemos suponer que hubo antaño una distribución por sectores más diversificada con la actividad minera como recurso principal. Es de destacar el número proporcional de plazas hoteleras en comparación con el Andévalo oriental, estando ello en consonancia con el hecho de que el turismo como recurso esté más presente en las estrategias de la Cuenca Minera y Andévalo Occidental. En el caso del Andévalo Occidental el turismo se muestra más volcado al alojamiento rural y en línea con la oferta turística de la comarca Costa Occidental, hacia la que parece bascular la mitad sur de la Comarca, en su tendencia centrífuga respecto al desarticulado Andévalo. Sin embargo, su relación con el Andévalo Oriental ha pesado en la decisión de incluir los pueblos de ambas comarcas en el ámbito de actuación del CEDER.
Los objetivos marcados por las propuestas se refieren a los ejes estratégicos de ambas comarcas, en los que se considera la fabricación del mueble y calzado como producción genérica en toda la comarca, así como la promoción de pequeñas industrias de carácter artesanal, lo cual es un perfil más ajustado al entorno de Valverde. Otras actuaciones bien pueden ser consideradas como aplicables a la mayoría de los territorios de Andalucía y se refieren a formación y a la mejora del equipamiento turístico, promoción del patrimonio, etc. En este caso particular habría que tener en cuenta que la dispersión de la población no ayuda a la concentración de servicios ni actividades industriales como ocurre en Valverde, aspecto necesario a contemplar para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Valga el ejemplo de que los dos núcleos con más población y candidatos ambos a ser la cabecera de la comarca, apenas suman el 40% de la población total.
Uno de ellos es la Puebla de Guzmán, situada en el centro de la Comarca y siguiendo el eje vertical norte-sur, por lo que le coloca en una posición válida de cara a mejorar la vertebración del territorio y ser sede de instituciones que gestionen las actuaciones necesarias para la regeneración del territorio.
Un aspecto importante a tener en cuenta y de reciente manifestación es el atractivo de un litoral más dinámico y donde más se han reforzado los lazos con el país vecino a través del puente internacional en Ayamonte. Este hito es un buen referente para actuaciones en pro de facilitar los contactos transfronterizos, necesarios para ambas márgenes. Casos significativos como Alcoutim y Sanlúcar del Guadiana, separados físicamente por apenas 100 m. de río y más de 90 de carretera, y otros más al interior cuya proximidad en torno a los 20 km. da una idea de posibilidades funcionales en caso de construir puentes y mejora de infraestructuras en general.
Estos hechos se han tenido en cuenta en las iniciativas Interreg, valorando las oportunidades que presenta la incentivación de las comunicaciones en la frontera más antigua de Europa como factor clave para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de estas comarcas. Esta excepcionales condiciones de aislamiento han profundizado las tradiciones locales tales como romerías, Cruces de Mayo, Corpus Christi... Es en Alosno donde se considera popularmente el origen del fandango y si no es así, puede ciertamente ser el lugar donde tomara la importancia y el estilo propio de un cante y cultura andaluces, relacionados en este ámbito comarcal con la dura vida del minero y la soledad de estos parajes.[ Jesús Gabriel Moreno Navarro ]
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