TORROX

Historia. Situada en una zona de tránsito y comercio entre los habitantes de Tartessos y los navegantes griegos y fenicios que expedicionan hacia el Mediterráneo occidental, el primer asentamiento humano confirmado en las cercanías del municipio se encuentra en la margen derecha de la desembocadura del río Torrox, en las cercanías del faro, donde se enclava una ciudad-factoría romana dedicada a los salazones y garum . Esta ciudad, posiblemente la Claviclum  romana, es el primer antecedente del actual pueblo.

Al comienzo de al-Ándalus, gran parte de la población participa a finales del siglo IX en la llamada rebelión de los mozárabes (población andalusí de religión cristiana), que el califa Abderrahmán III sofoca, aunque permanece la población, que depende de la taha de Frigiliana. Durante el Califato pertenece a la cora o provincia de Rayya, a la taifa del siglo XI de Algeciras-Málaga, primero, y a la de los Banu Zirí granadinos después, integrándose en el siglo XIII en el reino almohade y luego al estado nazarita de Granada. Entonces, Torrox se convierte en un centro productor de seda, por lo que se generalizan las plantaciones de moreras, y de azúcar de caña.

Los castellanos conquistan la población el 29 de abril de 1487, tras la toma de Vélez Málaga, y aunque al año siguiente la vuelve a tomar El Zagal, se incorpora a la Corona de Castilla poco después, permaneciendo en principio parte de la población autóctona. Los Reyes Católicos le confiere el título de Muy Noble y muy Leal Villa y en 1503 una real cédula permite la construcción de una torre para defenderse de los piratas. En ese mismo siglo, Torrox sufre una considerable despoblación debido a la Guerra de las Alpujarras y la expulsión parcial de los moriscos. En el siglo XIX, la villa experimenta las consecuencias de la Guerra de la Independencia, una severa epidemia de fiebre amarilla, que asola toda la provincia, y a finales de 1884 la destrucción de los llamados Terremotos de Andalucía. Alfonso XII visita la zona afectada y el 19 de enero de 1885 y se hospeda en Torrox.

Monumentos y economía.  El principal monumento de Torrox es su propio casco urbano, de calles estrechas, empinadas y retorcidas, quebradas en numerosas placitas y tramos de escaleras, y con casas encaladas que se amoldan al desnivel del terreno adaptándose a los caprichos de las rocas. Sobre este caserío de raigambre árabe, se alza la mole imponente de la iglesia de la Encarnación, construida en el siglo XVI sobre una mezquita. Junto a ella, también destaca la ermita y el convento de Nuestra Señora de las Nieves, la ermita de San Roque, la Aduana y Casa de la Moneda, del siglo XVIII, y la actual Casa de la Cultura, del XIX. Asimismo, se conservan restos de los torreones del antiguo recinto amurallado de Torrox y el llamado Ingenio, una antigua fábrica de azúcar de caña del siglo XIX, perteneciente a la familia de los Larios.

La economía del municipio se basa tradicionalmente en la agricultura, que aprovecha la buena calidad de la tierra y el suave microclima subtropical de la zona. En las explotaciones, ordenadas en pequeños bancales, abundan los olivos, la vid, productos hortícolas como la judía verde y sobre todo el aguacate, que se convierte en su cultivo principal. En cuanto a la artesanía, en Torrox se sigue trabajando el esparto, la caña, la albardonería, la forja y la madera. Pero frente a esta economía tradicional, desde los años setenta cobra especial importancia el turismo, que posibilita un fuerte crecimiento del pueblo y de sus núcleos anexos. El turismo permite un fuerte incremento de la población, que pasa de los 8.000 habitantes de comienzos de los ochenta del siglo XX hasta la cifra actual. No obstante, este desarrollo tiene su contrapartida, sobre todo en el núcleo de Torrox-Costa, en un urbanismo desordenado y descontrolado que, aunque no alcanzan los fuerte desequilibrios de la Costa del Sol occidental, sí pone en peligrola belleza peculiar y única de este rincón del mediterráneo. Torrox celebra el día de las Migas, en diciembre, Carnavales, Semana Santa, la verbena de San Antonio, San Juan el día de los patronos, el 5 de agosto, y la  Virgen de la Candelaria, en septiembre. Entre los platos más típicos se encuentran las migas y la ensaladilla arriera, destacando los dulces y la calidad de los vinos del lugar.