ANDÚJAR

Situación. La mayor parte de ese territorio se extiende por Sierra Morena * , cuyos materiales antiguos, de la era primaria cuando menos, mineralizados dan lugar a la explotación del plomo y, más recientemente, a la del uranio (en 1960 se instala una planta de tratamiento de este mineral). Pendientes y suelos silíceos no propician la agricultura y abunda el bosque de encinas, alcornoques, robles, y castaños, a la vez que desde las cumbres de Sierra Madrona *  descienden afluentes del Guadalquivir tan importantes como el Jándula. Pero la ciudad de Andújar se localiza en el valle junto al Río Grande de Andalucía, que beneficia una fértil vega y proporciona buenas arcillas, que, unidas a la mineralización citada (plomo sobre todo utilizado en cerámicas), explican la actividad alfarera. Su posición estratégica viene de la localización entre el Valle y la Meseta en un antiguo camino, después carretera Andalucía-Madrid y hoy autovía.

Historia. Lugar de paso, pues, acumula bastante información desde sus inicios (Iliturgi, de origen quizás tartésico) y en la época de la Bética romana, que se recoge en el Diccionario de Pascual Madoz de mediados del XIX. Se sabe que dentro de la región de los túrdulos se toma partido por los romanos cuando éstos ganan la batalla de Ibera, y que los cartagineses Asdrúbal, Magón y Almírcal la sitian para luego ser liberada por los Escipiones con un ejército inferior al africano. Es constituida municipio con los dictados denominados Mágnum Triunphate ; y el historiador Tito Livio afirma que fue una de las dos "maxime insigne magnitude". Sin embargo, sigue contando Madoz, "su fe en los romanos no duró más que la prosperidad de sus armas" y los soldados refugiados en la antigua Andújar tras la derrota de Publio son entregados a los vencedores cartagineses, lo que desata la ira del hijo de aquél, que, luego de vencer a los púnicos, toma la ciudad, "pasados a cuchillo hombres, mujeres y niños y dado fuego, reducida a un montón de escombros" .

Islamizada Andalucía, Alturja es un núcleo importante, amurallado por Abdalá en el siglo IX, en la kora o provincia califal de Xauén o Jaén y encabeza un distrito o iqlims , que incluye a Martos, Baeza y Úbeda. Mantiene esa situación de capital comarcal hasta hoy, pues en el Censo de Floridablanca, 1789, es sede de partido y desde 1834, en que se instituyen, es cabecera de partido judicial. Pero antes, como otras ciudades andaluzas, la primera conquista cristiana no es definitiva, pasando durante tiempo de la soberanía castellana a la andalusí hasta bien entrado el siglo XIV. En 1383 el rey Juan I la dona al lejano rey de Armenia, León V, si bien cinco años más tarde vuelve a la Corona, que la regala como señorío a D. Enrique y Dª Catalina con motivo de su matrimonio y en 1467 recibe el título de ciudad.

Como en los demás pueblos y ciudades de Andalucía, también una parte de la población musulmana permanece, a veces trasladándose a otros sitios como repobladores y confundiéndose con los cristianos viejos. Así, según Lapeyre, hay aún una morería importante en la ciudad a principios del siglo XVII. E incluso García Mercadal recoge, entre otros muchos, el viaje de un embajador marroquí de 1690 que afirma tener noticias de que en Andújar, y en otros lugares, la mayoría de la población "trae su origen de los Andalus", lo que no deja de ser una apreciación, sin duda exagerada, pero añade una noticia, por lo menos curiosa sobre Andújar. "Toda la nobleza de que gozan hoy consiste para los abencerrajes convertidos en cristianos en transmitirse por herencia el privilegio de llevar sobre el hombro una cruz dibujada sobre el vestido"Tal es la señal con que se distinguen entre ellos" su número es incalculable, los unos reivindican esa genealogía y otros no. Hay incluso algunos a quienes horroriza el oír hablar de ella".

Volviendo a la posición estratégica, se revela también en las guerras napoleónicas y en junio de 1808 es ocupada por el general francés Dupont tras un terrible saqueo, fijando su cuartel general al año siguiente José Bonaparte y el mariscal Soult. En 1823, el duque de Angulema, jefe de los denominados Cien Mil Hijos de San Luis, intenta con las Ordenanzas de Andújar frenar la gran represión antiliberal promovida por el regreso del absolutismo. A propósito de este ejército, se dice que cuando avistan el Valle del Guadalquivir, tras cruzar las desérticas tierras meseteñas, quedan asombrados y presentan armas en señal de admiración. En 1835 se constituye en esta ciudad la Junta Soberana Central de Andalucía encabezando el movimiento juntero, por lo que Andújar aparece si duda como uno de los lugares claves del andalucismo * .

En la época de Madoz la ciudad contaba con 9.353 h. en casi 1.800 casas, distribuidas en 50 calles, ocho plazuelas y dos plazas, de las que se destaca la de la Constitución, donde se alzaba el Ayuntamiento, "precioso edificio" del que no desmerecían otros como la carnicería, el matadero y la alhóndiga. Sus calles recordaban el trazado islámico y sus empedrados recogían "fragmentos de las piedras en que se crían varios metales, muchos mármoles de mezcla y blancos, algunas coralinas y cristal de roca, todo lo cual indica la cercanía de los terrenos que ocultan dichas producciones". Asimismo se señala la alfarería, fabricación de teja, ladrillo, loza blanca y pintada; más "las famosas alcarrazas y otras vasijas de barro poroso muy delgado, de color blanquecino que se exportan a Madrid y otros muchos puntos por ser muy a propósito para enfriar el agua". La agricultura era poco más que la trilogía mediterránea de cereales, aceite y vino y la posición estratégica queda marcada con la existencia de postas, correos y diligencias.

Plano urbano y monumentos. El casco histórico es muy amplio y mantiene en parte el antiguo trazado andalusí (calles estrechas, retorcidas, callejones sin salida, plazuelas), si bien sólo quedan algunos tramos de la muralla (calle Silera y torreones de Fuente Sorda y Tavira) y edificios mudéjares. De la Bética romana se mantiene el puente de trece arcos sobre el Guadalquivir y algún trozo de cerca. El centro geográfico y administrativo de la urbe es la plaza del Ayuntamiento, edificio barroco, muy cerca del cual se encuentra la iglesia de San Miguel que contiene un buen retablo plateresco y un cuadro atribuido a Alonso Cano. Próxima, la iglesia de Santa María, de fachada renacentista y torre mudéjar, que guarda un cuadro de Pacheco y La Oración del Huerto ,de El Greco. Hay otros templos y edificios de cierto valor, como Santa Marina, construida sobre una mezquita, Santiago, San Bartolomé, el antiguo hospital. También la capilla de Santa María de la Cabeza, patrona de la ciudad, a cuya ermita, situada a 19 km., en la Sierra, se va de romería el último domingo de abril, constituyendo, con la del Rocío, los dos grandes acontecimientos andaluces de este tipo. También es importante la feria de septiembre. El plano urbano apenas se ha modificado por el norte y oeste, en parte condicionados por arroyos y el mismo Guadalquivir, que supone un claro límite meridional, reforzado por el trazado de la autovía. La expansión tiene lugar por el este, mientras la zona industrial se localiza al suroeste, entre la autovía, el Guadalquivir y el ferrocarril.

Economía, población y área de influencia.  Andújar, capital de la comarca de su nombre, se caracteriza porque su desarrollo económico está vinculado al modelo agrícola existente en la Andalucía del Guadalquivir durante un larguísimo periodo de tiempo; incluso hay autores que sitúan su origen en la época romana. Y, en segundo lugar, por la generación de un proceso de industrialización local bastante dinámico, basado en la agroindustria, concretamente en la transformación del fruto del olivo a través de cooperativas productoras y comercializadoras; mientras que con un peso más secundario destaca la industria textil. Así pues, la rama de la alimentación es la más relevante dentro del conjunto industrial de la ciudad donde se acumula el 17,6% de la producción provincial. Evidentemente, en un contexto como este cabe resaltar dos características de la estructura industrial: a) el tamaño de las empresas, donde predominan las pymes de tipo medio (existen 56 de más de 30 trabajadores) dedicadas a las actividades agroalimentarias y al textil. Y b) la integración del tejido empresarial con el exterior. Ésta se produce principalmente a través de la exportación de productos agroalimentarios, sobre todo el aceite, existiendo todavía hoy un importante volumen de producción que se vende al exterior en bruto, sin marca.

Además, a principios de los años noventa del pasado siglo, Andújar ve reforzada su actividad económica a través del desarrollo del sector terciario, ya que especialmente concentra una porción importante de actividades comerciales y de servicios públicos (centro de salud, partido judicial, notarías, centros de enseñanza y registros de la propiedad) de gran poder de atracción poblacional debido a sus buenas comunicaciones. Históricamente es una ciudad muy bien conectada por el camino real de Madrid, y en épocas recientes, cuando se produce la modernización de las carreteras en Andalucía, por la autovía N-IV y por el ferrocarril Cádiz-Madrid. Las buenas conexiones y la capacidad de la ciudad para evolucionar y modernizarse a través de sectores que lideran el proceso de transformación de Andalucía le permiten no sólo mantener su nivel de población e incluso aumentarla levemente, sino además, incrementar la renta per cápita hasta situarse entre 8.225 y 8.800 euros de media. De esta manera Andújar pasa de tener 32.373 h. en 1960 a 37.920 en el 2002. Presenta en las últimas décadas un incremento continuado del crecimiento vegetativo, si bien el movimiento inmigratorio es ligeramente negativo, de ahí que en el último año la tasa de incremento relativo de la población sea "0,56%. Estas características influyen en la estructura por edades pudiéndose catalogar como de relativamente joven, pues el porcentaje de éstos hasta los 20 años representa un 25,6% y, en todo caso, sus índices coinciden con la media andaluza. Por otra parte, la distribución de la población ocupada revela las características de su economía, de forma que un 13,4% representa la población activa agraria, un 25,4% corresponde a la industrial y un 48,9% a los servicios (el 12,3 restante depende de la construcción). Distribución que a su vez hoy nos demuestra que el área agrícola continúa siendo el soporte territorial de Andújar, aunque es cierto que consigue consolidar su economía urbana a través de la incorporación de funciones industriales y de servicios de fuerte peso.

Por otro lado, su tamaño poblacional, el dinamismo de sus actividades económicas y el potencial funcional como centro de servicios le confieren un indudable papel de centro comarcal, aunque el diseño hacia fuera de las comunicaciones sigue dificultando las relaciones intercomarcales como sucede históricamente, puesto que hay evidentes carencias en la calidad del firme y en el trazado. Andújar encabeza desde antiguo un territorio, plasmado hoy en una comarca que comprende su extenso municipio y siete más, limitando con las comarcas de Linares, Martos y el área de Jaén, coincidiendo bastante su área de influencia (o pueblos desde donde se desplazan a la cabecera para adquirir bienes y servicios) con la delimitación comarcal.[ Gabriel Cano / Rosa Jordá Borrell ]