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PUENTE GENIL

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(CO). Capital, junto con Montilla, de la Comarca Campiña Sur, a 68 km. de Córdoba, a 171 metros sobre el nivel del mar, con 170 km 2  de municipio y 28.639 h. en el 2006

Situación y emplazamiento. Suele situarse a Puente Genil en el corazón de Andalucía y, en realidad, está  prácticamente en el centro topográfico, en la encrucijada de las provincias de Córdoba, Málaga y Sevilla. Dista en línea recta unos 240 km. de la frontera con El Algarbe, al sur de Sanlúcar de Guadiana, en Huelva, pasando por Sevilla; y 270 km. hasta Pulpí, en el límite con Murcia. Y en el eje de los meridianos se miden unos 100 km. hasta Fuengirola, en Málaga, y 130 hasta el río Guadalmez, lindero con Ciudad Real al norte de El Guijo, pasando por Córdoba.

De ahí su buena posición viaria tradicional y actual  con la autovía 45 Córdoba-Málaga, con enlace a sólo 15 km., desde donde se accede al este y oeste andaluz, conectando por Antequera-Granada o Sevilla-Huelva; aunque cuenta con otras carreteras y también con la proyectada autovía Estepa-Guadix por Alcalá la Real, así como vía de ferrocarril. Muy importante será una nueva estación de Alta Velocidad en la ya inaugurada línea Córdoba-Antequera

Su ubicación en la campiña de suelos fértiles  y la cercanía del Subbético cárstico,  con surgencias y fuentes, proporciona una oferta territorial importante, la agraria,  bajo un clima mediterráneo, de casi 18 ºC de temperatura media anual, inviernos suaves y veranos calurosos y secos. Lógicamente el río Genil explica el emplazamiento concreto en un puente y la posibilidad de regadíos. Se trata del afluente más importante del Guadalquivir, cuyo nacimiento en Sierra Nevada atenúa los menguados caudales de verano.

Origen y precedentes.  Puente Genil es de origen medieval, pero su territorio es ocupado desde antiguo, como prueban los yacimientos prehistóricos, la Villa romana de Fuente Álamo, la necrópolis visigoda de Los Castellares y la atalaya andalusí de castillo de Anzur, que pertenece a la cora o provincia califal de Cabra. Después se incluye en la taifa de los Banu Zirí granadinos, para pasar a finales del XI al extenso reino abbasí de Sevilla, casi en la frontera con los Ziríes, y en el XIII se integra en el reino almohade de Córdoba.

Las tropas del rey de Castilla Fernando III conquistan el lugar en 1240 y en 1257 el caserío, junto a un  puente de madera, es donado a don Gonzalo Yáñez, tomando el nombre de Pontón de Don Gonzalo. En 1583, Hernán Ruiz sustituye aquel paso por uno de piedra, muchas veces reparado (la última en 1874) tras las riadas del Genil. Al otro lado del puente surge a mediados del XVI un poblado (llamado primero Tejares y luego Miragenil) en el término de Estepa (pues el río era frontera entre los reinos de Sevilla y Córdoba), uniéndose ambos (en 1821 provisionalmente y en 1834 de forma definitiva) con la denominación de Puente de Don Gonzalo, adscrito a la provincia de Córdoba, creada un año antes. Poco se sabe de la historia de este pueblo (que a principios del XVII tenía una importante morería, según el historiador francés Lapeyre) hasta mediados del XIX, en que aparece en el Diccionario  de Madoz.  

Puente Genil desde mediados del XIX.  Entonces, 1842, vivían en Puente Genil (que así se llamaba ya) 6.048 h. (Montilla tenía 13.224 y Lucena, 16.652) en 1.159  casas, "de dos pisos en calles bastante pendientes, aunque bien empedradas" y dos plazas, "siendo apetecible la principal de éstas, solamente en los meses de verano por el fresco que recibe en su pequeñito paseo, que se apoya en la muralla del río".  Se mencionan la Casa Consistorial, varias escuelas, Pósito o almacén de grano, dos parroquias (una en cada barrio, perteneciendo a la vicaría de Estepa, al menos la de Miragenil), siete ermitas y dos suprimidos convento.

La mayor parte de lo cultivado se dedica a olivar, generando exportación y varios molinos de aceite, mientras el cereal es escaso y se importa. A orillas del Genil hay muchas huertas, aunque podrían producir más si no fuera "por los crecidos costos que tienen las anorias y gruas con que se riegan". Por lo demás destaca la alfarería (15 fábricas, tres de teja y ladrillo), que también se vende a otros pueblos, citándose, por otra parte, la feria de agosto y la velá de Santiago.

Puente Genil desarrolla a final del XIX una cierta actividad industrial, reflejada hoy en algunos edificios, y se va convirtiendo también en una típica agrociudad andaluza (de tamaño medio, en torno a los 20.000 habitantes, con la agricultura como principal ocupación, alguna industria derivada y los servicios propios de un centro comarcal), pasando de 12.959 en 1900 a 30.656 en 1950 (máximo censal conocido). Eso supone un incremento medio de 16 por mil, superior al natural (natalidad/mortalidad, que en Andalucía estaba en torno al 12 entre 1920 y 1950) y, por lo tanto, indica inmigración. La expansión de las huertas del Genil, la especialización de la fabricación del membrillo, más la producción de aceite y vino (ligado a Montilla) no detienen la emigración que sufre Andalucía, de manera que Puente Genil desciende sus efectivos hasta 1981 (26.215 h.), perdiendo 4.441 en esos 30 años, menos desde luego que otros pueblos y ciudades. Después se recupera lentamente y el censo del 2005 apenas supera al de 1940, pero en el de 2006 se registran 28.639.

Plano, monumentos y turismo.  Como ya se ha indicado, la ciudad de Puente Genil es la unión en 1843 del núcleo del Pontón (o La Puente), que se sitúa junto al puente de madera que existe en la margen derecha del río Genil, y del núcleo de Miragenil, que se enclava en la orilla izquierda del mismo. Tanto el cauce hídrico como la orografía del terreno configuran un plano urbano en forma triangular, cerrado en su parte oeste y sur por el río Genil, en el que podemos distinguir tres zonas bien diferenciadas: el casco antiguo y núcleo principal, situado en la margen derecha del río Genil, que ocupa la zona central de la ciudad; la zona de expansión del casco histórico y los barrios de trazado moderno en la parte este del núcleo; y los polígonos industriales y las nuevas urbanizaciones que se localizan en el exterior de la ciudad, fundamentalmente a lo largo del río y de las principales vías de comunicación.

El casco antiguo o centro histórico se adentra en el gran meandro que forma el río Genil, que es su límite por el oeste, comprendiendo la parte más antigua de la ciudad. Este espacio se encuadra dentro de las calles Pérez Siles-Cuesta del Molino al norte; el eje de las calles Cortes Españolas-Cristóbal Castillo-García Lorca por el este; y las calles Río de Oro y Miralrío por el sur. Esta zona corresponde al antiguo y originario núcleo del Pontón formado por los conocidos Barrio Bajo y Barrio Alto (en los que aún se aprecia la trama medieval de sus calles), los barrios del Tarajal y el Albaicín o el Cerro de los Poetas. Esta zona se articula en torno a las calles Don Gonzalo y Aguilar (principales arterias del casco histórico), Cuesta Romero, Cuesta Vitas y Madre de Dios. En el centro geográfico de la población se encuentra la Plaza del Romeral, que lo es también en lo comercial, y de la cual parte un amplio paseo ajardinado donde confluyen numerosas calles, con edificios singulares. Cruzando el puente a la otra orilla del Genil, desde la Plaza de Santiago y bordeando la isla del Obispo hacia el sur se encuentra el antiguo núcleo de Miragenil, también denominado Barrio de Santiago, cuya trama, a diferencia de la anterior, se caracteriza por un trazado de calles rectilíneas, como la de Bailén, el callejón Alto y Bajo o la calle Nueva, entre otras.

Hacia el este se pasa a la zona de expansión de la ciudad, formada por barrios modernos que se caracterizan por tener una trama edificatoria bien diferente a la del casco histórico, pues sus largas calles se trazan perpendicularmente en sentido norte-sur (como la avenida de Andalucía) y este-oeste (destacando la avenida del Poeta Manuel Reina), formando manzanas regulares de mayor altura. En este sector podemos encontrar numerosos equipamientos (Plaza de Abastos, la Casa de la Cultura, la biblioteca municipal o el Teatro al Aire Libre), iglesias y zonas ajardinadas como la Plaza de España o el parque de la Marina. Al noreste, y estructurada en torno a  la avenida de la Estación, se extiende la zona de expansión residencial, comercial y de servicios más reciente de la ciudad, en parte favorecida por la localización de la estación de ferrocarril, que acogerá en breve la vía de AVE Madrid-Córdoba-Málaga.

Por último, en el exterior de la ciudad se encuentran diversos polígonos industriales (como los de San Pancracio o el de la Cuesta del Molino), en expansión contínua, y las urbanizaciones residenciales que en los últimos años proliferan en Puente Genil, como la del Garrolatillo al norte o Las Palomas en el suroeste.

La relativa modernidad de la historia de Puente Genil explica que su monumentalidad no alcance la de otras ciudades, como, por ejemplo, las cercanas Lucena o Montilla. Sin embargo, existe un conjunto histórico en Miragenil, casco antiguo, barrio de la Isla, paseo del río, puente... Lo más antiguo y simbólico es el castillo árabe de Anzur, de la época califal, que domina la ciudad desde un monte cercano y su visible figura se incluye en el escudo municipal. La torre de la iglesia de la Purificación es una atalaya árabe reconstruida en el XIX y el templo data del XIV, con influencia mudéjar, al igual que el de la Victoria, del XVI. De este mismo siglo es la parroquia de Jesús Nazareno, antigua ermita, con una imagen atribuida a la Escuela sevillana de Montañés, según unos, o a la granadina, en opinión de otros. El exuberante barroco andaluz tiene buenas muestras en las iglesias de la Concepción, las Mercedarias, Santiago o San Francisco (sede del Palacio de Congreso y Exposiciones).

El Puente también es un símbolo y refleja, como dijimos, la historia de la ciudad. Data del XVI, pero los arcos gemelos son de 1703 y el volado de ladrillo del arquitecto francés Lemonier, cuya casa constituye una de las piezas visitables; no la única, también las de los duques de Medinaceli o la de la familia Ximénez-Montilla. Y son notables los ejemplos de arquitectura industrial de las casas de la Aurora (Central Eléctrica de 1849, con ladrillo visto y estilo neomudéjar) y la Alianza (fábrica de Harinas, 1887, de Lemonier) y otros edificios del XIX (Liceo Mercantil) o del XX (Teatro Circo).

La Semana Santa destaca por las representaciones bíblicas de ponteños que acompañan a las imágenes, y que se juntan, unos 400 personajes (desde el Pentateuco al Imperio Romano más alegorías y símbolos), el domingo de Resurrección. A principios de mayo se hace una versión infantil, en abril se celebra la Romería de San Marcos y, en agosto, la feria. En Puente Genil hay, como en otras ciudades andaluzas,  una gran afición al flamenco y aquí han nacido cantes o variaciones de palos, como el  zángano de la Puente, las sevillanas sanmarqueñas y bailes próximos a los verdiales; y, especialmente las saetas cuarteleras, cantadas a dúo en las Corporaciones. El pontonés Fosforito (Antonio Fernández Díaz), uno de los mejores cantaores de flamenco, al que se dedica algún Festival, tiene ilustres antecedentes en esta ciudad (como Pedro Lavado), que da a la luz también a ilustres poetas (Manuel Reina, Rodolfo Gil, Ricardo Molina o Juan Rejano).

Población, economía y área de influencia. El municipio de Puente Genil es un gran centro socioeconómico, cuya actividad económica se centra en el comercio y los servicios en general, siendo de igual forma una de las ciudades más industrializadas de la provincia. El sector manufacturero gira en torno a la industria agroalimentaria, que está especializada en la extracción de aceite de oliva, pastelería industrial, conservas vegetales y frutales, especialmente en su famoso dulce de membrillo y el vino. Igualmente son de gran importancia las empresas que producen materiales para la construcción (tradición de sus tejares) y, en los últimos años, experimenta un fuerte crecimiento el sector dedicado a las iluminaciones eléctricas (fabricación de productos y servicios de montaje de iluminación exterior ornamental para ferias, fiestas de Carnaval, luces navideñas, etc.). Además, existen también otras ramas como la construcción de mueble y madera, cerámicas electromecánicas, traviesas para líneas de ferrocarril de alta velocidad, fabricación de maquinaria para manipulación y elevación, productos químicos y jabones, empresas textiles, de distribución y logística. A la par que perdura la artesanía (fundición de bronce, madera, marquetería, hojalatería, taracea, alfarería y bordados).

Por otra, el principal aprovechamiento agrícola en este municipio es el olivar de aceituna de aceite (3.054 ha en regadío y 7.882 ha en secano en el año 2005). La superficie de viñedo cultivada no llega a las 400 ha, y la variedad de uva producida son Pedro Ximénez y bobla, obteniéndose unos vinos de excelente calidad gracias al clima cálido y seco y a las óptimas condiciones edáficas. Mientras que la industria más famosa del municipio (dulce de membrillo) se provee de plantaciones de cultivo que se localizan en distintos puntos de la geografía nacional.  Con la ejecución de la segunda fase del Plan de Riegos Genil-Cabra, se abren otras perspectivas en nuevos cultivos y la implantación de empresas de transformación y conserveras, ya que 2.614 ha están integradas en este plan.

Todo ello permite que la población de Puente Genil (28.639 h. en el 2006) tenga una renta media declarada relativamente alta en el contexto rural de la provincia de Córdoba (11. 443, 45 euros). De la misma manera, y desde el punto de vista demográfico, la evolución de la población de derecho es de clara expansión hasta los años cincuenta del siglo XX (30.656 h) y decreciente a partir de entonces, hasta la década de los ochenta en que empieza a notarse una ligera tendencia creciente, con dos puntos máximos en el año 1998 (29.161 h.) y 2003 (29.402 h.). Esta dinámica explica el aumento del índice de envejecimiento de la población en los últimos años (el 16,26% de la población es mayor de 65 años), mientras que la  menor de 20 años alcanza el 23,91% del total en el año 2005,  estructura que todavía permite un crecimiento demográfico positivo y posibilita que el municipio mantenga una densidad de población de 168,5 h/km 2 , valor superior a la media comarcal y provincial. [ Gabriel Cano / Francisca Ruiz Rodríguez / Ángel Luis Lucendo Monedero ].

 

 
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